La Córdoba de Amodeo Ruiz Olmos : paseo por el tiempo y el espacio
Un cuarto de siglo se cumple ahora de la muerte en Madrid de Amadeo Ruiz Olmos (1913-1993), escultor de origen valenciano que durante muchos años tuvo abierto estudio en Córdoba, concretamente en la plaza del Profesor López Neyra. Artista de sólida formación, que pasó en sus años de juventud por las Academias de Valencia y de Santa Isabel de Hungría de Sevilla, tuvo en sus inicios mucha labor en el ámbito de la imaginería religiosa, pero en su edad madura brilló como maestro indudable de la estatuaria pública.
De hecho, se puede considerar que las calles de Córdoba, ciudad de rico patrimonio pero escasos y a menudo anticuados museos, son una extensión museística de su legado. Y eso es así porque sus obras están repartidas por buena parte de la urbe y permiten realizar un paseo muy artístico que
Iglesias Fernandinas: Mirar más allá de la Mezquita
Primero la Mezquita-Catedral, luego un paseo por el Puente Romano y la Calahorra, un camino a la Sinagoga para conocer de camino la Judería, el Alcázar de los Reyes Cristianos y quizá algunos de los museos. ¿Se termina aquí lo que un visitante tiene que conocer de Córdoba? Para muchos turoperadores y agencias de visitas organizadas, sí. Los que pasan un día más, quizá se acerquen a visitar Medina Azahara, el conjunto que en breve será Patrimonio de la Humanidad. Y para la mayoría, ya se ha visto Córdoba. El proyecto que está desarrollando el Cabildo Catedral para dar a conocer las iglesias históricas de Córdoba, la inmensa mayoría fernandinas, luchará precisamente para conseguir que el turismo se «desfocalice», es decir, que al margen de concentrarse en la Mezquita-Catedral como el conjunto más importante 121, la ciudad, también atiei da a otras cosas. Por eso a partir del
Jueves de Corpus Cristi
Fiel a una tradición que se remonta a mediados del siglo XVI, Priego celebró ayer la festividad del Corpus Christi, siendo junto a Granada, Sevilla y Toledo una de las pocas localidades de nuestro país en las que se mantiene el jueves posterior a la solemnidad de la Santísima Trinidad.
Un año más, la parroquia de la Asunción y, particularmente, el barrio de La Villa han sido los puntos de interés del programa de cultos y actos elaborado para la ocasión. Así, mientras en el templo se ha celebrado desde el pasado lunes el triduo en honor a Jesús Sacramentado, el barrio medieval de la localidad, acicalado con mimo por sus vecinos para la ocasión, lucía sus mejores galas para recibir a los visitantes que durante la tarde-noche del
Viaje al corazón de Córdoba
Hay unas cuantas razones fundamentales para amar Córdoba: es pequeña, es vieja y es una de esas pocas ciudades del mundo —Venecia, por ejemplo, Granada— a las que no puede irse nunca por primera vez. Porque a Córdoba se regresa siempre, aunque no se haya estado jamás en ella. Hace más de mil años lo tuvo todo y, por esas cosas de la historia, ya no le queda más que su leyenda. Si además uno ama la literatura, hay una sola y poderosa razón para no olvidarla: allí le esperan, entre otras, las sombras insignes de Ibn Hazm, de Luis de Góngora o de Federico García Lorca, que quiso ver en ella la ciudad del silencio y de la melancolía, la ciudad lejana y sola, celeste y enjuta, la ciudad callada.